Abuela cobró la indemnización de una familia víctima de la violencia

“Los sicarios le dispararon y mi papá con el sonido de los disparos se despertó y con el último tiro que él tenía lo ultimaron para no dejar testigos o al menos es lo que yo tengo entendido”

Alexis García Ahumada, víctima

Alexis tenía 5 años cuando su padre, Luis García, fue asesinado por estar en el lugar equivocado, intentando ganarse la vida como comerciante en Córdoba para poder enviarle dinero a su familia en Medellín. Nunca supo si fueron los paramilitares o guerrilleros los que lo ultimaron para no dejar huella de la disputa por el territorio.

“Mi papá tenía pensado llevarme allá”, contó García Ahumada.

Con sacrificio, su familia sobrevivió a la espera de tener algún día la ayuda sicológica y la indemnización económica que les prometió el Estado, que los reconoció como víctimas.

Según Alexis, le decían “que nos faltaba este papel, que nos faltaba el otro, que nos faltaba una fecha que teníamos que esperar”

Entre el papeleo y los esfuerzos de su mamá para sacar adelante a sus hermanos, pasaron ocho años sin que la Fiscalía, Acción Social o la Unidad de Víctimas, les dieran noticias.

“Humillante porque cuando uno llegaba ni siquiera se habían tomado la molestia de leer el proceso”

Alexis García

Ilusionados, recibieron por fin una carta de la Unidad de Víctimas de Belencito Corazón, que frecuentaron por años.

“Dice que no teníamos derecho a hacer la reclamación porque ya la abuela, es decir la mamá de mi papá, había hecho la reclamación”, afirmó la víctima sobre la carta.

Su verdadera abuela nunca recibió el dinero y quien lo reclamó, un año después de su petición, no tuvo necesidad de presentar los documentos que a su familia tanto le exigieron.

Alexis indica que la reclamante “no se llama como se llama mi abuela, y el número de documento de cédula de la señora, tampoco es el de mi abuela”.

La respuesta sólo llegó cuando un juez de tutela advirtió a los funcionarios que, de no contestar, irían a la cárcel.

“Que no tiene nada que ver pero que como no hay dinero que tenemos que esperar”

Alexis García

Para Alexis y su familia, no cabe duda que es una estafa y así lo denunciaron a la Fiscalía que engavetó el proceso.

“Yo no sabría decir quién, pero fue al interior de la Unidad de Víctimas que se realizó la estafa y suponemos que están estafando a otras personas”, resalta García Ahumada.

Gladys Prada, directora de Registro Unidad de Víctimas, puntualizó que “no hay un fraude de la Unidad ni una tercera persona”.

Noticias Uno habló con la Directora de Registro y Control de la Unidad de Víctimas, quien dijo que se trató de un error por un caso de homonimia de la víctima

“No hay una suplantación son ambas personas víctimas”

Gladys Prada, directora de Registro Unidad de Víctimas

Según la entidad, la supuesta abuela de Alexis es una víctima real que desconocía el número de cédula de su hijo desaparecido. La Registraduría le mostró dos documentos con el mismo nombre, Luis García, y ella asumió que el de su hijo era el que aparecía cancelado por muerte, cuando en realidad, este correspondía al del padre de Alexis.

“El error que no es un error doloso, en el que nos indujo la información de la señora María, de buena fe”, agregó la funcionaria.

Alexis dice que “ellos no han reconocido que fue una estafa simplemente han dicho que fue un error, pero pues…”.

La Unidad reconoce que se vulneraron los derechos de Alexis:

“A tener una buena información sobre su caso y a tener una expectativa legítima de cuándo se le pagaría que es lo que estamos intentando subsanar”

Gladys Parra

Y dijo que la reparación está garantizada: “Su indemnización no se ha tocado, está ahí, lo que pasa es que debe priorizarse en un orden de pago y debe contar con los fondos de la Unidad”.

Pero la fecha del pago, aún es incierta: “La unidad para las víctimas tendrá hasta el 2021, progresivamente para pagar”, afirmó Parra.

 Alexis asegura que “es vergonzante, esto está mal y el Gobierno y la Fiscalía no están tomando las medidas”.

Según la Unidad, hay un déficit de unificación documental, que antes de la ley de víctimas, tenía registros a mano sin indexar. La Corte Constitucional les dio un plazo para hacerlo:

“Hasta el 31 de diciembre de 2017, para que nosotros ordenemos nuestro proceso de gestión documental (…). Es un paso de 4 millones y medio de registros”, explicó Parra.

22 años después de la muerte de su padre, Alexis tendrá que esperar más tiempo para intentar sanar las heridas.

Alexis dice que “no va a resucitar y no va a aparecer porque nuevamente fuimos victimizados, aparte que es bastante humillante porque son ocho años en los que se han burlado de nosotros”.

El Gobierno se comprometió a priorizar este caso.

Noticias UNO