Complejo panorama de desigualdad y machismo laboral
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Un complejo panorama de desigualdad y machismo laboral persiste en el país. La ministra de Trabajo, Alicia Arango reveló que las mujeres reciben 35 por ciento menos ingresos por cumplir la misma labor que los hombres y enfrentan un riesgo mucho más alto de perder del empleo.
En Colombia, una mujer con la misma preparación académica y capacidades laborales recibe 35 por ciento menos por cumplir la misma tarea que un hombre.
“Las mujeres en general ganan el 35 por ciento menos en el mismo trabajo y eso lo tenemos que acabar”, sostuvo la ministra.
Existen dos factores que hacen que una mujer esté en mayor riesgo de perder su trabajo, el primero es el acoso.
“Acoso sexual contra mujeres que no tienen otra opción porque es la comida de sus hijos y no pueden denunciar, existe bastante y estamos pidiendo a las mujeres que denuncien, que nos ayuden con la información”.
El segundo factor de riesgo es la licencia de maternidad, o pedir un permiso para cuidar a cualquier familiar enfermo.
“La maternidad no puede ser un problema, hemos pensado la licencia de paternidad que sea igual para que no sea sólo la mamá la que asuma el cuidado de los hijos y exclusión por ser mamá”, sostuvo Arango.
Según cifras del Gobierno, el mercado laboral está integrado por 46 por ciento de mujeres, sin embargo, al ascender dentro de las compañías, en el segundo nivel sólo el 38 por ciento son mujeres, en las juntas directivas sólo el 18 por ciento son mujeres y a las presidencias de las compañías sólo llega un 7 por ciento de mujeres.
“Se da que a medida que va subiendo el nivel en la empresa, es un techo que impide el desarrollo profesional”.
Según el Observatorio de Género de la Universidad del Rosario, la mujer por hacer más esfuerzos para cuidar a su familia es más vulnerable en el ámbito laboral.
“Una mujer debe pedir permisos para cuidar a la familia, empieza a ser visto como negativo. Cuando lo pide un hombre es como un punto a su favor”, dijo Danghellu Zúñiga, Observatorio de Género Universidad del Rosario.
“Se han abierto más puestos de trabajo para mujeres, carreras que se han feminizado como la enfermería y otras se han masculinizado como la medicina”.