Cómo surgió el mito de que podría quedarse pegado si tiene intimidad en Semana Santa
¿Qué tan cierto es que esto suceda en Semana Santa?
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Los colombianos son personas de agüeros y creencias que con el pasar de los años se pueden volver absurdas, pero una de las más famosas y que sigue generando debate es qué tan cierto es que una pareja se puede quedar “pegada” si tiene sexo en Semana Santa.
“Si tiene relaciones sexuales en Semana Santa Dios lo va a castigar”, es una frase que se escucha mucho por parte de las personas mayores que alcanza a llenar de miedo a jóvenes que quieren vivir “desenfrenadamente” su intimidad.
Aunque no se sabe exactamente en qué parte de Colombia se empezó a escuchar que una “pareja se puede quedar pegada si tiene intimidad en Semana Santa”, sí queda claro que este mito nos acompaña desde hace mucho, pero ¿qué tan cierto es?
¿No se puede tener relaciones sexuales en Semana Santa?
Esta creencia, está muy ligada al ámbito religioso, pues el sexo y el placer son mal vistos por la iglesia católica, es por esto que, hay quienes exponen que practicarlo llevaría a recibir un castigo divino como “quedarse pegado”.
Pero, desde el punto médico este hecho no es descabellado, ya que se ha registrado algunos casos. La BBC Mundo, en un artículo, puso sobre la mesa el tema y dejó claro que esto sí puede pasar, pero no necesariamente tiene que ver con la religión y menos con Semana Santa, es más, puede ocurrir en cualquier comento a cualquier pareja.
El doctor John Dean, médico de sexualidad en Reino Unido, le dijo al medio que este fenómeno se llama “penis captivus” o “pene atrapado”.
“Cuando el pene está dentro de la vagina se va hinchando gradualmente”, explicó, añadiendo: “Los músculos de la base pélvica de la mujer se contraen rítmicamente con el orgasmo. Mientras esos músculos se contraen, el pene se atasca y se hincha aún más”.
El médico además, ha profundizado en el tema hablándolo con algunos pacientes que le exponen que han pasado por esto y allí, surgió un nuevo término para esta misma situación.
“Vaginismus”, según John Dean consta de “que los músculos vaginales de la mujer se contraen involuntariamente, impidiendo el coito”.
De esta manera, sí se han registrado casos de personas que se quedan “pegadas” tras el acto sexual, pero como se expuso, esto no tiene que ver con la religión, sino más bien va por un tema biológico.