Video | Con chaleco antibalas, Juan Diego Alvira probó vidrio blindado: ¿cómo le fue?
Juan Diego Alvira se tomó muy en serio la prueba de los vidrios blindados. Con chaleco antibalas y un tirador certificado, demostró que la seguridad de estos objetos, ¿cómo le fue?
- ¿Llevar a niños al colegio es violencia? Psicólogo opina sobre polémica de Susana Boreal
- ¿El Icetex ya cuenta con los recursos para los créditos? Directora habla Sin Carreta
Los ‘rompevidrios’ asechan en cualquier esquina detrás de cada semáforo, sin importar la ciudad. Con bujías, macetas o piedras, atacan a conductores y pasajeros, llevándose lo que encuentran dentro del vehículo. Estas bandas delictivas operan de manera constante, convirtiendo el riesgo en una realidad latente en muchas zonas urbanas.
En Bogotá, solo en los últimos dos años, se han robado 5,500 vehículos, incluyendo muchas camionetas de alto cilindraje e incluso blindadas. Según los investigadores, estos autos son revendidos o se convierten en parte de operaciones de bandas que delinquen en otras partes del mundo. La situación en Colombia refleja la constante amenaza de los rompevidrios, que siempre está presente.
Juan Diego Alvira se le midió a probar un vidrio templado estando dentro de un vehículo
Ahora bien, para poner a prueba las películas de seguridad más confiables del mercado, Juan Diego Alvira de W Sin Carreta realizó un experimento. Comenzó golpeando un vidrio con una bujía, pero el resultado fue sorprendente: el vidrio no se rompió. La prueba continuó con una maceta, que al primer impacto solo dejó una marca, pero tras el tercer golpe, el vidrio finalmente cedió.
Lo que no imaginaba Juan Diego es que ahora existen vidrios blindados más económicos, capaces de resistir hasta balas de 9 mm. Además, estos no requieren el mismo tipo de permisos de tránsito que los blindados de mayor calibre. Para llevar a cabo su prueba, Juan Diego decidió subirse al vehículo, protegido con un chaleco antibalas y acompañado por un tirador certificado.
Al momento del disparo, como se esperaba, el vidrio aguantó, dejando grietas pero sin traspasar. Con otro disparo, el vidrio continuó resistiendo, demostrando que la tecnología en seguridad automotriz está avanzando y ofreciendo opciones efectivas para enfrentar las amenazas actuales.