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Uno, Dos, Tres

Tres | Navarro camina duro, a pesar de su prótesis. ¿Saben por qué?

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Antonio Navarro empezó a construir su candidatura para la Alcaldía de Bogotá. ¿Sí será que al que madruga Dios lo ayuda?

¿Recuerdan ustedes cómo llegó Jimmy Carter a la Presidencia de los Estados Unidos? ¡Golpeando de puerta en puerta en los años setenta! Simplemente decía: «Yo me llamo Jimmy Carter y quiero ser presidente de los Estados Unidos». Era gobernador demócrata del estado de Georgia.

La frase la copió Gustavo Petro en su reciente campaña presidencial. Y ahora, es Navarro Wolff quien desarrolla la idea con una importante modificación: pide, aleatoriamente, que familias lo inviten a desayunar, a almorzar o a cenar a sus casas, y va a sus residencias a escucharlos y decirles que quiere ser alcalde de Bogotá. Las familias que lo invitan conversan sobre sus necesidades y expectativas.

Ya ha adelantado reuniones con los líderes de Ciudad Bolívar que actuaron con los verdes en las pasadas elecciones presidenciales.

Navarro, aunque cojea por cuenta de la prótesis de su pierna, comenzó ganando la carrera. Navarro parecería tener mucha más experiencia política que los demás hombres y mujeres que aspiran a la Alcaldía de Bogotá. ¿En dónde está y qué hace Pacho Santos? ¿Y en qué anda Diego Molano? ¿Y David Luna? ¿Perdido, como su nuevo jefe? ¿Y qué es de la vida de Carlos Fernando Galán?

«A Navarro le falta una pierna, pero le sobran corazón y ganas», dicen sus promotores. ¿Será que sí?

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