Taxistas del aeropuerto El Dorado se quejan de cobros excesivos por parte de Taxi Imperial
Para manejar un taxi de los que prestan servicio en el aeropuerto El Dorado un empresario debe invertir 31 millones por año… Y aunque el gerente de la concesionaria dice que los elementos pueden conseguirse en otra parte, en la suya se cobra tres veces más por la tableta necesaria. Qué Tal Esto.
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Para manejar un taxi de los que prestan servicio en el aeropuerto El Dorado un empresario debe invertir 31 millones por año. Y aunque el gerente de la concesionaria dice que los elementos pueden conseguirse en otra parte, en la suya se cobra tres veces más por la tableta necesaria. Qué Tal Esto.
La remodelación del aeropuerto internacional El Dorado ha sido un dolor de cabeza para el presidente de Taxi Imperial, Uldarico Peña, que considera que sus finanzas se han visto notablemente afectadas, luego de ganar la licitación para administrar el transporte de los pasajeros que llegan a Bogotá.
“Tenemos un contrato con OPAIN que un sólo parqueadero vale 38 millones de pesos mensuales que hay que pagar”, aseguró Uldarico.
Adicional al parqueo de los 1.400 vehículos que tienen afiliados para recoger turistas, deben pagarle a Opain 1.200 pesos por cada carrera que sale del aeropuerto.
Sin embargo, los taxistas afiliados a su empresa aseguran que se les está trasladando dichos gastos con creces.Las nuevas condiciones para recoger pasajeros en El Dorado y en el Puente Aéreo, según el sindicato de taxistas, son las siguientes:
“Tiene que tener 116 millones, que es lo que vale una camioneta FIAT con su cupo; adicional de esa inversión, tiene que pagar 240 mil pesos mensuales para que pueda prestar el servicio público en el Aeropuerto Internacional El Dorado; tiene que adicionarle a eso un equipo de comunicaciones que vale 1.300.000 y hay que renovarlo aproximadamente cada 12 meses (…) tiene que pagar una frecuencia de 95 mil pesos mensuales, tiene que pagarle un rodamiento a la misma empresa de 50 mil pesos aproximadamente mensuales, adicional a eso usted tiene que comprarle los seguros contractual y extra contractual también a la misma empresa, tiene adicional a eso tiene que comprarle uniformes a su conductor o a usted si se va a sentar en el mismo carro y cada día tiene un uniforme, ese uniforme también lo vende Taxi Imperial”.
Entonces un conductor debe hacer una inversión anual de unos 31 millones de pesos para poder trabajar en el aeropuerto internacional El Dorado y todos sus pagos llegan a las arcas de Taxi Imperial.
El requisito que más generó polémica es la tableta, que funciona como GPS y que le suministra la información de los vuelos a los taxistas y ordena los turnos. Los taxistas aseguran que el precio del equipo de comunicaciones es muy elevado.
“La tablet que está vendiendo el señor Uldarico Peña vale 170, 150 mil pesos, y la vende en 1.350.000 pesos”.
El Centro de Alta Tecnología de Bogotá certificó el valor comercial de las tabletas que pueden ser instaladas en los taxis y que reúnen los requisitos para trabajar en el aeropuerto.
Por su parte, Uldarico Peña negó que su empresa esté obligando a los conductores a comprarle los aparatos, pues los conductores los pueden adquirir en el lugar de su preferencia. Y añadió que también es falso que Taxi Imperial esté imponiendo la compra de una camioneta FIAT para laborar en el aeropuerto.
Uldarico Peña asegura que no tiene otra intensión que ofrecer un buen servicio al público extranjero que visita nuestro país.
“Como colombianos estamos en la obligación de tenerle las mejores comodidades y con los taxistas con mayor voluntad, mayor cultura y estructura para poder prestar un servicio y darle una imagen como se lo merece esta hermosa Colombia”, añadió.
El sindicato de taxistas logró que el ministerio de Transporte iniciara una investigación para establecer si efectivamente hay una exageración en los costos de los artículos para trabajar en el aeropuerto.
“El ejercer el sindicalismo a mí me costó la expulsión del aeropuerto, me tocó hacer una huelga de hambre, encadenarme, por la persecución que hubo por parte de la empresa”, aseguró Román Beltrán.
El pulso entre los empresarios y taxistas en el aeropuerto continúa.