Padre Chucho “sin Ley”

El popular padre Chucho que se hizo conocer en un canal de televisión, ahora celebra misas en un barrio de Bogotá… Pero lo hace invadiendo un espacio público sin permiso de la alcaldía… Él dice que no lo necesita y reta al alcalde a que lo saque, si es capaz.

Cerca de 600 personas se reúnen cada domingo en el parque principal del barrio Castilla de Bogotá, para escuchar la eucaristía que ofrece el párroco Jesús Hernán Orjuela, más conocido como el padre Chucho, quien se hizo famoso por sus salidas en televisión.

En donde apareció durante varios años hasta cuando sus programas fueron retirados del canal que lo había contratado.

Ahora se dedica a atender a sus feligreses del occidente de la capital. El padre Chucho, cuya popularidad entre los católicos es innegable, ha organizado sus misas a cielo abierto y viene ofreciéndolas desde hace ocho meses en la zona verde que está contigua a la parroquia.

El problema es que algunos vecinos se quejaron porque, según dicen, ellos tienen derecho al descanso y el ruido de un equipo profesional de audio que se ha instalado para que se escuche bien la ceremonia, les interrumpe su tranquilidad. La alcaldía de Kennedy intervino porque no existe autorización ni para celebrar eventos así sean religiosos, ni para usar el espacio público.

“La alcaldía local no ha recibido de manera oficial o formal ese tipo de autorización… Se ha venido generando como una perturbación hacia la comunidad”, dice un funcionario de la Administración Local de Kennedy.

La realización de una ceremonia religiosa con la asistencia tan nutrida que tiene la del padre Chucho, requiere también de un plan de emergencia aprobado por el Fondo de Prevención y Atención de Emergencias, Fopae.

Consultado el padre Chucho por Noticias Uno, él dijo que accedía a ser entrevistado pero delante de todos sus feligreses. “No le tengo miedo, no le tengo miedo a nada”.

El sacerdote hizo subir a Noticias Uno a la tarima y puso su micrófono para que todos los presentes e incluso los quejosos de su ruido en el barrio, pudieran escuchar a quien lo interrogaba y reaccionaran abucheando al reportero.

El Sacerdote Orjuela dijo esto: “¿Cuando usted va a sacar el permiso que legalmente se necesita para hacer la actividad? Respuesta: Al alcalde está totalmente de acuerdo, yo no pido permiso, ni nunca le voy a pedir permiso, yo solo le pido permiso a Dios, entregar la gloria y la bendición”.

El sacerdote añadió que sus creencias religiosas están por encima de Ley. El padre Chucho aseguró que no le pedirá permiso a nadie y que la Constitución puede decir lo que quiera.

“Al alcalde Petro y al doctor Juan Manuel Santos y al que esté, lo respeto, pero a ellos no les pediré permiso”, dice el Padre Chucho.

El cura también dijo que lo persiguen porque él habla de los problemas de seguridad y de la malla vial del sector. Y se atrevió a lanzar una acusación contra el acalde de la localidad y se victimizó: “Por todas las partes me quieren callar, me calumnian, me insultan”.

Jorge Hurtado, alcalde encargado de Kennedy, sostiene que sea quien sea está sometido al orden jurídico y “si no se cumplen con los permisos o con los requisitos mínimos pues la administración tiene obviamente por virtud de la Ley unas acciones que adelantar”.

Pero el padre Chucho, pese a su condición de sacerdote, no se arrodilla. “Que venga el alcalde que lo estoy esperando, a ver si me va a sacar, que venga pero primero lo saco yo a él”, afirma el Padre.

La vía principal del barrio Castilla, entre tanto se bloquea. “Es que ustedes saben que se tiran el prado, están dañando, está no es zona para subir los carros y usted sabe que dañar árboles”

Las autoridades distritales creen que el mejor mensaje de Navidad es el respeto de toda la comunidad no solo a la creyente. Y que las normas se tienen que hacer cumplir ante los ciudadanos que vistan de civil o de sotana.