Plantón por la libertad de los responsables de desfalco de Elite International
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En las instalaciones de la Fiscalía se registró un plantón por parte de víctimas de Elite International, quienes manifestaron su inconformismo porque los promotores de esta estafa quedaron en libertad hace pocos días.
Elite International, empresa dedicada a la comercialización de libranzas, fue intervenida por la Supersociedades hace dos años, a sus directivos, entre los que figuran Alejandro Navas, Jorge Enrique Navas, Marino Constantino Salgado y Felipe Salgado se les investiga por lavado de activos, enriquecimiento ilícito y captación ilegal de recursos del público, sin embargo, hace pocos días una juez les concedió la libertad.
“La Fiscalía ha demostrado la más absoluta inoperancia en este caso, el fiscal imputó y una juez determinó que quedaban libres los cabecillas de estas empresas criminales. De los seis capturados solamente hay una detenida, del resto todos están libres, por favor, señores, respétennos” señaló Diego Rengifo Montoya, víctima de Elite.
Los afectados aseguran que el millonario desfalco se dio, en gran parte, porque las entidades que vigilaban esta compañía intervinieron tarde, “dos años y no hemos visto un resultado real, no nos han mostrado dónde era que la Supersociedades revisaba a esta empresa, dónde están los documentos, por qué no se dieron cuenta”, dijo Liliana Cruz, otra de las víctimas de Elite.
Por su parte, el superintendente de Sociedades, Francisco Reyes, expuso que se están adelantando las gestiones correspondientes para que las víctimas recuperen su dinero: “Se han cumplido la totalidad de las gestiones que la ley establece y también para lograr satisfacer los intereses de los afectados, se han intervenido personas naturales y jurídicas, se ha procurado recuperar activos, acciones revocatorias, todo con el propósito que los afectados puedan recibir parte de lo que están reclamando”.
Las más de 6.000 víctimas le piden al Gobierno entrante que le dé celeridad al proceso de intervención, ya que hoy están embolatados $1,3 billones.