No paran las amenazas contra líderes de Curvaradó
Los golpes a la organización de los Úsuga supondrían tranquilidad para los campesinos que han regresado a las tierras que los paramilitares les han arrebatado en el Urabá chocoano y no es así.
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La Comisión Intereclesial de Justicia y Paz denunció que Raúl Palacios, líder de las comunidades negras de Curvaradó –Chocó- fue amenazado de muerte por paramilitares por denunciar a empresarios, palmicultores y ganaderos que están involucrados en el despojo de tierras a los afrodescendientes.
Según Justicia y Paz, Palacios también denunció la instalación de la base militar del Batallón de Selva número 54 adscrito a la Brigada 17, en zona de las comunidades negras y sin consulta previa.
El pasado seis de diciembre la comunidad de Curvaradó realizó una vigilia frente a las instalaciones de la base con el acompañamiento de la comisión de ética internacional de España.
La Comisión Intereclesial dijo que a pesar de las declaraciones de los paramilitares contra empresarios comprometidos en el despojo de tierras aún faltan muchos de los por ser judicializados.
Hace tres años, la Corte Constitucional dijo que 100 mil hectáreas de tierra de Curvaradó y Jiguamiandó son de los afrodescendientes, pero hasta la fecha ni un solo metro cuadrado les ha sido devuelto.