“Buenaventura no será militarizada”: Mindefensa, quien también reprochó acciones al ELN

El ministro de Defensa, Iván Velásquez descartó que Buenaventura vaya a ser militarizada, como medida para combatir el recrudecimiento de la violencia que protagonizan las bandas criminales “Shottas” y “Espartanos” y las cuales tienen en vilo a la población del puerto del Pacífico colombiano.

La decisión fue tomada tras un consejo de seguridad que el ministro sostuvo con la cúpula militar, integrada por el comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo, y el director de la Policía, general William Salamanca, quienes al llegar al puerto se desplazaron a la comuna 12, la más afectada por la violencia de estos grupos.

Desde ese sitio, el jefe de la Cartera emitió un contundente mensaje a los ‘Shottas’ y ‘Espartanos’, en el que aclara que, pese a que estos manifiestan su voluntad de paz, “el Gobierno no se presta para estar con acuerdos con estas bandas”.

“Las garantías jurídicias son las que puedan negociar con la Fiscalía. El Gobierno no negocia beneficios jurídicos porque no le corresponde. Nosotros decimos además: los pactos entre bandas criminales no son un pacto con el Estado. La fuerza pública no hace pactos con los criminales. Que eso signifique una posibilidad de obtener beneficios jurídicos, estamos de acuerdo, pero no significa que ni la Policía ni las Fuerzas Militares van a dejar de cumplir con su actividad“, expuso de manera enfática el ministro Velásquez.

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Lejos de militarizar a Buenaventura, el ministro decidió enviar a más de 100 uniformados de inteligencia, para vigilar a los miembros de estas bandas criminales, quienes se disputan tanto el control territorial, como las rutas del narcotráfico en el puerto.

Los dardos al ELN

El ministro de Defensa también expresó su indignación con el ELN porque, pese a la firma del cese al fuego bilateral (que comienza desde hoy, 06 de julio), “no ha manifestado voluntad de paz”, por cuenta de los últimos hechos delictivos que ha perpetrado, como el secuestro de la sargento Karina Ramírez y sus dos hijos pequeños.

“El Ejército de Liberación Nacional tiene que dar claras muestras de su voluntad de paz. Es incomprensible que el mismo día que el Mando Central expide un comunicado llamando a todos los miembros al cese (al fuego) […] estos miembros hubieran cometido hechos, además ,contra personas que se encontraban indefensas”, señala Velásquez.