La deuda pública de Colombia: situación Actual y perspectivas futuras
El objetivo del Gobierno es reducir la deuda pública al 55 % del PIB, un nivel que consideran manejable dentro del marco fiscal.
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En la reciente Asamblea Anual de la Asociación Bancaria de Colombia (Asobancaria), el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, reveló datos alarmantes sobre la deuda pública del país, destacando el esfuerzo del Gobierno para mantener sus compromisos financieros en medio de serios problemas fiscales y económicos.
Antes de la pandemia provocada por el Covid-19, la deuda pública de Colombia se situaba en el 48,4 % del Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, durante el primer año de la pandemia, esta cifra aumentó drásticamente a casi el 61 % del PIB, alcanzando actualmente los 234.000 millones de dólares. Bonilla afirmó que el país está cumpliendo con sus obligaciones de deuda, pero reconoció la necesidad de volver a una trayectoria más sostenible.
El objetivo del Gobierno es reducir la deuda pública al 55 % del PIB, un nivel que consideran manejable dentro del marco fiscal. Bonilla explicó que, aunque la deuda total es de 908 billones de pesos (234.000 millones de dólares), parte de los vencimientos son a corto plazo, lo que obliga al Gobierno a realizar esfuerzos importantes en los próximos años, especialmente entre 2024 y 2026.
Durante la pandemia, el Congreso permitió al Gobierno ampliar su capacidad de endeudamiento en 70.000 millones de dólares. No obstante, se adquirieron compromisos adicionales sin control legislativo, elevando la deuda en otros 6.500 millones de dólares. En total, existen 12.000 millones de dólares que no están contabilizados dentro del cupo de endeudamiento aprobado, motivo por el cual el Gobierno solicita un incremento de 17.607 millones de dólares para cubrir estos compromisos y los intereses asociados.
El costo de los intereses es otro problema considerable. Colombia perdió su grado de inversión en 2021, lo que ha encarecido el servicio de la deuda. Para este año, el Gobierno prevé pagar 7.617 millones de dólares, de los cuales más de 3.800 millones corresponden a intereses. En 2025, el pago total será de 8.069 millones de dólares, incluyendo 3.200 millones en intereses, y en 2026 se proyecta pagar 5.724 millones, con 2.085 millones destinados a intereses.
Para abordar estas complejidades financieras, el Gobierno ha presentado al Congreso un proyecto de ley con mensaje de urgencia, necesario para cumplir con los compromisos pendientes con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otras instituciones financieras multilaterales antes de fin de año.
Además de la creciente deuda, el país enfrenta una caída en el recaudo tributario. Hasta mayo de 2023, los ingresos fiscales fueron de 116 billones de pesos, mientras que en el mismo periodo de este año solo alcanzaron 108 billones de pesos, representando una disminución del 6,5 %. Esta reducción en los ingresos obliga al Gobierno a ajustar el presupuesto público, recortando 20 billones de pesos en gastos, sin afectar los programas sociales y las principales iniciativas gubernamentales.