Dos hermanos capturados por ataque a lideresa Francia Márquez
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En Buenos Aires, norte del Cauca, las autoridades capturaron a otras dos personas sindicadas del ataque a la lideresa Francia Márquez. Un proyectil al interior del tanque de la moto utilizada para perpetrar el hecho, escuchas telefónicas, retratos hablados y la identificación de fotografías permitió dar con el paradero de estas personas que pertenecerían a una banda dedicada al hurto de motos y minería ilegal.
Después de la aprehensión de un menor de edad, labores de inteligencia de Fiscalía y Policía permitieron ubicar una motocicleta que fue impactada durante el ataque armado a la vereda Lomitas, donde se encontraban reunidos varios líderes afro del norte del Cauca.
“Fue posible capturar a dos personas de nombre Rosalindo Pérez y Frank Eduard Pérez como los tres principales responsables de este hecho criminal, frente a este esquema de seguridad y a la reunión de los líderes sociales”, indicó el coronel Fabio Alexander Rojas, comandante Policía Cauca.
Escuchas telefónicas y labores de vecindario permitieron establecer que los dos hermanos capturados participaron en los hechos ocurridos en zona rural de Santander de Quilichao donde resultó herido un escolta de la líder Francia Márquez.
“Pertenecerían a grupos de delincuencia común dedicados al hurto de motocicletas en el sector y, quienes participarían en actividades de minería ilegal en Santander de Quilichao”, manifestó Leonardo Fabio Vergara, director Fiscalías Cauca.
Según las autoridades, los detenidos tienen anotaciones de posibles hechos delictivos desarrollados en el sector que, sumado a retratos hablados e identificación de fotografías, permitieron establecer su identidad y pedir las órdenes de captura.
“Son imputados por los delitos de terrorismo, homicidio en grado de tentativa y el tráfico, fabricación o porte de armas de fuego de uso privativo de las Fuerzas Militares”, agregó Vergara.
El menor de edad fue enviado al centro de reclusión Toribío Maya de Popayán y los dos hermanos de 18 y 23 años cobijados con medida intramural en el centro penitenciario de Santander de Quilichao. Las autoridades continúan investigando si se trató de un acto terrorista y quiénes son los perpetradores, o si fue un hecho fortuito ligado a un intento de hurto.