Masacre de Macayepo: Corte Suprema niega petición de libertad al exsenador Álvaro García
El exsenador había sido condenado a 40 años de cárcel por su responsabilidad en la masacre ocurrida en el departamento de Bolívar
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La Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia, con ponencia del magistrado Jorge Emilio Caldas, negó una petición de la defensa del exsenador Álvaro ‘El Gordo’ García que pedía tumbar la medida de aseguramiento impuesta por el desplazamiento forzado del que fueron víctimas varias familias que tuvieron que abandonar sus viviendas por la masacre de Macayepo, perpetrada por paramilitares en el año 2000.
El caso tiene que ver con las familias que en el año 2000 tuvieron que dejar sus viviendas tras el ascendió del grupo paramilitar “Bloque Héroes de los Montes de María” quienes incursionaron en la zona y asesinaron a varios pobladores.
La defensa de García también pedía libertad provisional, o en su defecto, la sustitución de la medida de aseguramiento por una no privativa de la libertad, peticiones que también fueron negadas.
La masacre de Macayepo tuvo lugar entre el 9 y el 17 de octubre de 2000, en las veredas El Limón, La Palma, Los Deseos, El Pavo, El Floral, entre otras, del corregimiento de Macayepo en comprensión municipal de El Carmen de Bolívar (Bolívar) y San Onofre (Sucre).
Dicha acción tuvo como propósito afianzar el dominio paramilitar en la zona y a su vez recuperar una considerable cantidad de semovientes que le habían sido “robadas” al ganadero José Joaquín del Niño García Rodríguez.
Para facilitar la incursión armada, el ganadero acudió al exsenador para que, prevalido de su dignidad de senador, lograra que las autoridades militares del departamento de Sucre omitieran cumplir su deber de contrarrestar el ataque paramilitar.
Álvaro García Romero fue condenado en 2010 a 40 años de prisión por la Corte Suprema de Justicia por su responsabilidad en la masacre de Macayepo y otros crímenes relacionados con el paramilitarismo. Las investigaciones determinaron que García Romero tenía vínculos con los paramilitares y que había facilitado su accionar en la región de los Montes de María.