El presidente de Estados Unidos dejó en su silla de la reunión del G 20 a su hija Ivanka Trump
El presidente de Estados Unidos dejó en su silla de la reunión del G-20 a su hija Ivanka Trump, a quien no obstante, no se le dio la palabra cuando le correspondía a ese país plantear su posición en las discusiones.
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Culminó en Hamburgo la cumbre del G-20 que reunió por dos días a los líderes mundiales que hablaron sobre temas de terrorismo, cambio climático y comercio.
Pero sus álgidas reuniones tuvieron una presencia poco usual, Ivanka la hija del presidente de Estados Unidos Donald Trump, se sentó en al menos dos ocasiones junto a los líderes cuando estos discutían temas de gran importancia mundial.
Según Trump su hija tomó su puesto porque él tenía que atender otros asuntos y que su confianza en ella es total.
Ivanka Trump se limitó a escuchar sin dejar ver la posición de la Casa Blanca sobre lo que se estaba debatiendo en las sesiones.
Ante las críticas de algunos países porque Trump no dejó un funcionario de un rango mayor para que lo sustituyera, la canciller alemana Ángela Merkel salió en defensa de la hija del presidente estadounidense diciendo que ella trabaja en la Casa Blanca y que eso le da un cargo y un rango en la línea presidencial.
Los disturbios fueron los otros protagonistas de la cumbre, carros incendiados, y enfrentamientos entre manifestantes y la policía dejó como saldo 190 uniformados heridos y 45 detenidos. Incluso con la culminación del G-20 los disturbios no cesaron. La policía tuvo que usar chorros de agua para dispersar a las personas.