Fotos inéditas de restos óseos de desaparecidos del Palacio de Justicia

Las imágenes de la fosa común que abrió un juez en 1985 para enterrar a guerrilleros del Palacio de Justicia tiene las características de las que en otras latitudes se han abierto para ocultar crímenes contra la humanidad.

En un sitio, excavado en enero de 1998, fueron tomadas las 17 fotografías durante la exhumación de 93 cuerpos sepultados como NN, en una fosa común del cementerio del sur de Bogotá. Allí aparecieron varios esqueletos completos, uno al lado de otro, los cuales fueron sectorizados por el equipo forense del CTI, para preservarlos y lograr su identificación a través de muestras de ADN.

La posición de los restos del cementerio es muy similar a los encontrados en fosas comunes con desaparecidos de las dictaduras en Argentina y en Bosnia, durante las limpiezas étnicas entre serbios, bosnios y croatas. Los cadáveres eran colocados uno junto al otro y, a su alrededor, restos óseos dispersos de otros cuerpos

Los restos encontrados correspondían a personas que murieron durante la tragedia de Armero y el holocausto del Palacio de Justicia, por lo cual fueron seleccionadas 23 muestras, como filtro, para su análisis forense. Una de las muestras, que estaban envueltas en bolsas blancas, permitió en 2001, la identificación de Ana Rosa Castiblanco, empleada de la cafetería del Palacio, quien forma parte del grupo de otras 10 personas que salieron vivas y sus cadáveres no han aparecido.

Un fragmento de fémur izquierdo y un fragmento de tibia, se logró la identificación de Carmen Cristina Garzón, guerrillera del M-19, quien ingresó al Palacio de Justicia, salió viva y desapareció.

El análisis de fragmentos de mandíbula de su cráneo con el cruce de muestras genéticas de Bertha Beltrán, permitió la identificación de Mónica Molina Beltrán, otra guerrillera del M-19.

Por ahora la Fiscalía trabaja en la identificación de otros tres integrantes del M-19 que estarían entre los restos exhumados hace 16 años.