Fiscalía investiga sucesión de la familia dueña de Codiscos

La mayoría de los herederos de la familia que mandó sobre los estudios de grabación de música de Medellín se sienten defraudados con el testamento…
Los bienes de la empresa Codiscos se repartieron entre la familia de sus propietarios con un testamento aparentemente falsificado.
Don Alfredo Diez Montoya amasó una fortuna con la Compañía Colombiana de Discos más importante del país, Codiscos y también con la promotora colombiana de música, Prodemus, la fábrica de pilas Tronex y algo más de 3.000 acciones en el antiguo Banco de Colombia. En este lugar están todas esas empresas. (SB)
Don Alfredo murió hace 7 años y su última voluntad fue que se repartiera la fortuna entre sus 6 hijos, en partes iguales. Con los trámites en sucesión apareció un testamento en una notaría en Medellín, que tenía una supuesta copia guardada en la caja fuerte de Cosdicos. Pero la fiscalía encontró que ese testamento al parecer era falso y que detrás de esta maniobra presumiblemente estaban los dos hermanos mayores y un abogado.
El testamento al parecer fraudulento se reconoció como tal cuando se descubrió que el número de la escritura correspondía a una venta… Este es el testamento real.
Los investigadores del CTI encontraron que los dos hermanos y el abogado al parecer ocultaron el dinero de la herencia en sociedades fachada en Panamá, que vendieron parte de Codiscos a espaldas de la sociedad y que sustrajeron los dineros de las acciones que tenían en el banco.
La Fiscalía investiga la posible complicidad en este fraude de la ex gerente de Prodemus, una familiar, el asesor y consejero de don Alfredo, el contador de toda la vida de Codiscos, los abogados que abrieron la sucesión y a la Notaria 20, lugar donde se abrió la falsa sucesión.