Dos | Una frase histórica de un expresidente de la República que se puede aplicar hoy a una cadena radial

La cadena de radio Caracol dio en el clavo al elegir a Diego Rueda como director y presentador del programa «El alargue», entre las nueve y las once de la noche.

Ese era un horario inhóspito, semiabandonado, descuidado, sin gran audiencia y sin ninguna atención. De pronto, la dirección de la cadena radial produjo el gran golpe: escogió a Rueda como su director y presentador… y el periodista logró lo que parecía imposible: transformó el espacio en un gran, gran show radial deportivo, con una mezcla afortunada de opinión e información y con una agradable manera de conducir. Diego Rueda imprimió su sello al programa y, con talento, simpatía y actitud, lo trasformó en la gran compañía radial nocturna.

Y de pronto, ocurrió lo increíble: los directivos de la cadena retiraron a Rueda para enviarlo a construir un espacio en donde prima, fundamentalmente, la audiencia juvenil, que es roquera, y la femenina, que de ninguna manera es futbolera. Grave error; ojalá lo raparen.

Lo que ha hecho Caracol Radio me hace recordar una histórica frase del expresidente López, cuando asistía a un gran convite: «Y ahora que estamos tan bueno, ¿para dónde nos vamos?».