Críticas a candidaturas por firmas
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La proliferación de precandidatos presidenciales en busca de firmas para separarse de sus partidos no ha caído bien. Las críticas han llovido en medios de comunicación por desviar una figura de apoyo a ciudadanos del común, hacia políticos profesionales que así se ganan unos meses de campaña, sin ningún control.
La estrategia de recolectar firmas para impulsar candidaturas presidenciales, está empezando a desgastarse en el país, especialmente cuando la usan reconocidos dirigentes de partidos políticos, que hoy parecen querer separarse de sus viejas militancias, al menos temporalmente.
Con esta imagen (ver video) y el anuncio de querer recoger firmas el exvicepresidente, Germán Vargas Lleras, jefe de Cambio Radical, inició de hecho su campaña por la presidencia. Antes lo habían hecho Clara López, Piedad Córdoba y Sergio Fajardo, junto con otros 22 aspirantes presidenciales, sin contar a quienes piensan tomar la misma ruta, pero no lo han anunciado, como Humberto de La Calle.
La táctica no ha caído bien.
El editorial de El Espectador es crítico con la recolección de firmas por parte de dirigentes con partido.
Las críticas también aparecieron en las redes sociales, en cuentas de reconocidos periodistas.
26 candidatos presidenciales por firmas…unos porque no tienen partido y otros por que lo tienen pero les da pena reconocerlo
— Julio Sanchez Cristo (@jsanchezcristo) 29 de agosto de 2017
Y los caricaturistas no se quedaron atrás, pero la preocupación de los analistas se basa en la forma como se hace proselitismo abierto y se violan las normas electorales, con el título de recolección de firmas.
Lo que parecía ser una opción democrática para los ciudadanos sin partido hoy se ha vuelto moneda de cambio de los jefes políticos, que están desdibujando lo señalado por el constituyente del 91, según serios observadores.