Aciertos y desaciertos un año después de la firma del acuerdo con Farc

Un año después de la firma del acuerdo para poner fin al conflicto, Colombia avanza en la construcción de la paz con algunos traspiés pero sin reversa.

Sin el entusiasmo de hace un año, el presidente Juan Manuel Santos y el exjefe guerrillero Rodrigo Londoño, Timochenko, se encontrarán en el acto de conmemoración en el Tetro Colón.

La antigua guerrilla, ahora convertida en el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común reclama lo que considera incumplimiento de lo acordado con el Gobierno que, a su vez, argumenta que pese a los traspiés el posconflicto avanza.

“Esto es irreversible. No importa quien llegue el 7 de agosto del año entrante, esto no puede parar. Nadie va a permitir que esto pare. Sería inconcebible echar para atrás. ¿Cómo se puede echar para atrás? No se puede”, dijo el presidente Santos.

“Todo lo contrario: debemos construir sobre lo construido. Posiblemente habremos cometido errores. Posiblemente nos habremos equivocado, porque es una transición de 54 años de guerra hacia una paz. Eso no se hace de la noche a la mañana”, agregó.

“Lo que queremos es que ojalá podamos todos juntos trabajar para ir corrigiendo errores y avanzando lo más rápido posible, porque de eso se trata, de dejarles a todos nuestros hijos un país en paz”, concluyó el Presidente Santos.

Víctimas

Un estudio del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (CERAC), una entidad o de investigación privada, señala que “el proceso de paz previno, al menos, la muerte de 2.796 personas”.

De acuerdo con la misma entidad, de 867 combates que se registraban con reductos de las Farc en 2007, la cifra cayó a 106 en 2015 y a 13 en 2016.

Mientras tanto, en materia de civiles muertos en eventos de conflicto con participación con las Farc, de 1.835 en 2002 y 1.270 en 2007, la cifra se redujo en 2015 a 101 y en 2016 a 3.

Legislación

Para implementar los acuerdos se han expedido y sancionado 94 normas, entre ellas siete actos legislativos, 36 decretos-ley, cinco leyes aprobadas en el Congreso por el procedimiento fast track, y 46 decretos ordinarios.

Al mismo tiempo se han desarrollado los planes de restitución de tierras, proyectos productivos, satisfacción de los derechos de las víctimas, acompañamiento de las comunidades, inversión social e infraestructura, vías, educación, desarrollo agropecuario, adjudicación de baldíos y convivencia ciudadana, entre otras áreas.

Pero la polémica está en la ley estatutaria que reglamenta la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), un mecanismo para juzgar a todos los involucrados en el conflicto.

La JEP, que avanza en el Congreso para ser ley y se encargará de calificar jurídicamente las conductas graves cometidas por los actores del conflicto armado, ha sido criticada duramente por las Farc porque excluye la posibilidad de que terceras personas pudieran acudir a explicar cómo intervinieron en el conflicto.

Por tal motivo, la semana pasada el líder de las desmovilizadas Farc envió una carta a la Corte Penal Internacional (CPI). y de la ONU

Vea también Timochenkopide intervención de la ONU por incumplimiento de los acuerdos. 

Pese a esta discordia, el presidente Santos explicó que no es posible reversar el acuerdo de paz. “Primero, legalmente no se puede. La propia Corte Constitucional ya dijo que en los próximos tres periodos presidenciales no se puedan expedir leyes que vayan en contra de los acuerdos. Todo lo contrario, hay que expedir las leyes para que se cumplan, para que se sigan cumpliendo los acuerdos”, dijo el mandatario.

Lea también Santos pide a la Cámara aprobar rápidamente reglamentación de JEP

Acuerdo con otros actores delincuenciales

Entretanto, se desarrollan este año las conversaciones con el ELN para la paz sea completa en el marco de un cese el fuego bilateral que se lleva a cabo desde el pasado 1 de octubre y hasta el 12 de enero de 2018.

Asimismo, bandas criminales como el Clan del Golfo, manifestaron su intención de someterse a la justicia nacional.

Reconocimiento internacional

Santos  reconoció esta semana que la comunidad internacional ha dado “todo el apoyo, pero por supuesto para que esta paz se consolide, se vuelva estable y duradera. No para que volvamos otra vez al pasado”.

La Unión Europea, Estados Unidos y Latinoamérica hacen parte de los países que apoyaron y avalaron los acuerdos de paz firmados con las Farc.

La semana pasada, el Secretario General Adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Políticos, Jeffrey Feltman advirtió que la comunidad internacional no aceptaría que Colombia le incumpla a la exguerrilla Farc el “compromiso esencial” de permitirle participar en política después de que firmó la paz y depuso este año las armas.

“Hemos estado particularmente preocupados por comentarios sobre el posible cierre de la opción prevista en el acuerdo de paz para la participación política de las Farc“.

Le puede interesar ‘Lo pactado en el acuerdo final es de obligatorio cumplimiento’

Reincorporación de excombatientes a la vida civil

Más de 12 mil personas fueron acreditadas por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz para amnistías y en proceso de reinserción de las Farc, en el paso de este grupo a la legalidad. De estos, 10.733 excombatienes recibieron la oferta del Estado en bienestar integral, afiliaciones a pensiones, plan básico de salud e incluso capacitación.

Sin embargo, según el más reciente informe de la Organización de las Naciones Unidas, ONU, cada vez son menos los excombatientes de las Farc que se encuentran en las zonas de reincorporación, luego de la entrega total de armas.

El jefe de la misión de la ONU, Jean Arnault, en su informe explicó que “los exguerrilleros eran unos 8,000 al 20 de mayo en las Zonas Veredales cuando concluye el almacenamiento de las armas de las Farc. Quedaban el 70% al 15 de agosto. Hoy estimamos a 45% los que todavía están en los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación.

Vanesa Peralta – CM&