Video | Epa Colombia le dedicó emotiva carta a su hija desde la cárcel
#Video “Imposible no llorar”: en medio de todo lo que está viviendo Epa Colombia, la influencer no olvida a su pequeña hija y le escribió una carta con emotivas palabras.
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![Epa Colombia carta hija](https://img.canal1.com.co/wp-content/uploads/2025/02/14133209/video-epa-colombia-le-dedico-emotiva-carta-a-su-hija-desde-la-carcel.jpg?format=auto&width=1200)
Desde la cárcel El Buen Pastor de Bogotá, Daneydy Barrera Rojas, conocida también como Epa Colombia, envió una emotiva carta a su hija Samara, quien, a pesar de la distancia, sigue siendo su principal motivación y razón de ser.
En un mensaje lleno de amor y ternura, Daneydy expresa la angustia de estar separada de su hija, pero también la fortaleza que le da la niña para seguir adelante. La carta comienza con palabras profundas y sinceras que reflejan el dolor de una madre que no puede estar al lado de su hija en los momentos cotidianos más importantes: “Samara, hija, no sabes cuánto te extraño, tus ojos tan hermosos y tan perfectos, eres mi vivir, vivo por ti, eres mi motor para nunca rendirme”.
A lo largo del video, Daneydy describe con cariño las pequeñas acciones que hacen única a su hija: “Eres tan tierna, tan consentida, tan amorosa. Todos los días le pido a Dios que siempre te cuide, te ilumine, te guarde de todo mal y todo peligro”. Epa Colombia no puede evitar pensar en los momentos compartidos con su hija, como las mañanas en las que la pequeña disfrutaba de su desayuno y se preparaba para la jornada: “Al despertar te pienso, ¿cómo estarás? ¿Qué estarás haciendo? Si ya te comiste el huevito al desayuno, bañarte, concertarte y hacerte reír”.
A pesar de la separación, Daneydy deja claro que su amor y esperanza por reunirse con Samara son más fuertes que nunca. Ella le pide a Dios que pronto pueda estar junto a su hija para seguir cuidándola y amándola cada día más: “Le pido a Dios que muy pronto pueda estar junto a ti para cada día seguir creciendo y cada día amarte y cuidarte”. Al final de la carta, con una nota casi inocente, Daneydy canta: “¿Y cómo y cómo se llama usted, Samara?”, un gesto que refleja la ternura y el amor maternal incondicional.
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