Curva de la muerte tiene a Cáqueza sin agua

Cáqueza, en la vía de Bogotá a Villavicencio, no tiene agua potable porque decenas de accidentes han terminado convirtiendo al río que la abastece en un depósito de químicos de los que la industria petrolera envía a los llanos. No todos los camiones logran superar la llamada curva de la muerte y su carga termina en el acueducto.¡Qué tal esto!

La curva de la muerte, así fue bautizada un punto en la vía por los habitantes de Cáqueza, Cundinamarca. Del kilómetro 16 al 20 de la ruta que de Bogotá conduce a Villavicencio se producen constantemente accidentes. Muchos carros que llevan carga de hidrocarburos terminan en el río y contaminan su agua que es la que provee el líquido al municipio.

Desde el 16 de febrero los caqueceños están sin agua y la vida de los habitantes cambió drásticamente como consecuencia de los accidentes de la vía.

“Toca que acudir a la economía, el bañito con agua… A base de totuma”, dijo Luis Horacio, un habitante de Cáqueza.

Y Doris agregó que “con el agua que nos bañamos nos toca recolectarla para echarle a los baños”.

Los funcionarios del acueducto intentan con los medios que tienen limpiar el agua para impedir que el líquido contaminante siga su curso por las aguas del río Cáqueza y los habitantes de este municipio del oriente de Cundinamarca se las tienen que ingeniar para conseguir el agua.

“Aquí en el pueblo no podemos hacer aseo en los negocios, no se puede hacer ninguna clase de actividad porque no hay agua”, sostuvo una de las habitantes.

Mientras limpian el agua del río, la nueva compañía es un balde con agua para suplir sus necesidades básicas, cuando los carrotanques no dan abasto o no llegan a tiempo.

Johana Hernández contó que “en verano nos quitan el agua, en enero no hay agua, porque siempre la racionan, siempre es el tema que están racionando el agua y acá el recibo del agua llega como si nada”.

El Alcalde reconoce el problema y dice que la solución es un nuevo acueducto, pero no sabe cuándo podrá estar listo.

“Priorizamos en el plan de acción del municipio el acueducto municipal, el nuevo acueducto para Cáqueza eso es una prioridad”, manifestó el alcalde Jorge Poveda.

La Agencia Nacional de Infraestructura considera que los derrames son la sexta causa de accidentalidad en la vía, pero ésta es en la única en la que sus protocolos de control incluyen controles de firmas especializadas en derrames, puestos de almacenamiento de cal para los accidentes, kit para atender los derrames, pero con todas estas prevenciones los accidentes se siguen presentando.

Los habitantes esperan ver realidad el nuevo acueducto, pero mientras tanto cruzaran los dedos para que no se presente un nuevo accidente en la curva de la muerte.