“Se matan porque llevan una camiseta diferente”: papá de barrista asesinado en Medellín
El papá de uno de los jóvenes que perdieron la vida dijo que “una camiseta no vale una vida”.
- ¿Justa sanción? Técnico de Nacional no podría entrar a ningún estadio del país por 3 años
- Nacional se pronuncia por el caso de Alfredo Morelos: habrá “correctivos disciplinarios”
Habló en NotiCentro1 CM& la familia de uno de los barristas asesinados el fin de semana en medio de una riña que dejó otros 14 heridos, horas después del clásico entre Atlético Nacional e Independiente Medellín.
El papá de uno de los jóvenes que perdieron la vida dijo que “una camiseta no vale una vida”.
Le recomendamos leer: Robo de película: Ladrones intentaron llevarse un camión de valores en Valledupar
“Lo que muestran en los vídeos: mi hijo no aparece en ninguno de los vídeos, porque a él lo mataron en un punto ciego, hasta los mismos bandidos de esos combos saben cuáles son los puntos ciegos, dónde no hay cámaras y ahí fue donde me lo acribillaron, me lo machetearon, me lo apuñalaron (…)”, contó William Gallego, padre de barrista asesinado.
El papá de la víctima, Alejandro Gallego, llora desconsolado; estaba fuera del país y faltaba poco para reunirse con su hijo, pero la violencia suspendió acabó con esa ilusión.
El fin de semana, el joven de 26 años fue asesinado en las afueras del Estadio Atanasio Girardot en medio de lo que unos llaman riña y otros un cruel ataque con machete. El papá de la víctima se defendió y dijo que su hijo no es un delincuente.
“Le decían el zoombe, pero no es porque fuera un bandido, él fue bien criado, no, él ni era un ladrón, él no era un bandido, él no era un problemático”, dijo William Gallego.
El padre de la víctima le hizo un llamado a todas las hinchadas del país.
“¿Por qué perder la vida? ¿Por qué? o ir a matar a un joven a otros jóvenes que se matan, que no se conocen simplemente porque llevan una camisa diferente? Por eso”.
Anderson, Steven Jaramillo, es la otra víctima de esa madrugada violenta. A esta hora también es despedido por su familia y amigos en el centro de Medellín.