Un amigo de ‘Mane’ Díaz aceptó participar en su secuestro: le imputaron cargos ¿Quién es?
La persona judicializada permanece privada en la libertad como parte de una investigación a cargo de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales
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La Fiscalía colombiana presentó ante un juez de control de garantías a Yerdinson Bolívar Bolívar, alias ‘Arenca’, como uno de los responsables del secuestro de los padres del futbolista Luis Díaz el pasado octubre en Barrancas, en el departamento de La Guajira (norte).
‘Arenca’ fue contactado a mediados del año pasado por alias ‘Octavio’, integrante del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que, según la Fiscalía, le pidió ayuda para concretar la idea que tenía la organización criminal de secuestrar al padre del futbolista, detalló el ente acusador en un comunicado este jueves.
“Posteriormente, y en diferentes reuniones, habría proporcionado información sobre las rutinas y movimientos de las víctimas, pues tenía cercanía con ellas y se desempeñaba como entrenador de una escuela de fútbol que tenían“, agregó la Fiscalía.
El día del secuestro, ‘Arenca’ llevó mediante engaños a Luis Manuel Díaz y Cilenis Marulanda a un puesto de frutas en Barrancas, donde hombres armados los esperaban para secuestrarlos.
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Al acusado se le imputó el delito de secuestro simple, que fue aceptado. Actualmente, Yerdinson Bolívar Bolívar permanece privado en la libertad como parte de una investigación a cargo de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales, concluyó la Fiscalía.
Los padres del futbolista fueron secuestrados el 28 de octubre pasado, aunque Cilenis Marulanda fue liberada horas después. Luis Manuel Díaz, en cambio, fue entregado el 9 de noviembre a una comisión humanitaria de la Misión de la ONU en Colombia y de la Iglesia católica en las estribaciones de la serranía de Perijá, cerca de Barrancas.
Su secuestro levantó una ola de conmoción y rechazo en el país, donde los grupos armados ilegales es frecuente que usen el secuestro como estrategia para recaudar dinero y también la mayor crisis que ha habido en las actuales negociaciones del Gobierno con la guerrilla, que reconoció su responsabilidad en el delito.