25 días de protestas en Ubalá, Cundinamarca que mantienen en vilo el funcionamiento de la represa del Guavio

Se cumplen 25 días de protestas en Mámbita – Ubalá –Cundinamarca que mantienen en vilo el funcionamiento de la represa del Guavio.

Otras dos turbinas de la hidroeléctrica podrían dejar de funcionar la próxima semana poniendo en jaque el sistema energético, colombiano, y eventualmente podrían significar un aumento en los precios de la energía.

Le puede interesar: SuperSubsidio anuncia combate a la corrupción en el sector

En turnos de 24 horas se dividen las comunidades de Mámbita, sector B de Ubalá para exigir la pavimentación de tres vías de comunicación indispensables para el desarrollo de la región donde se encuentra la hidroeléctrica más grande del país y que produce el siete por ciento de la energía de todo el país.

Edwin García, líder social y presidente de Asojuntas advierte que las manifestaciones se mantendrán el tiempo que sea necesario hasta lograr soluciones a sus peticiones.

Dos turbinas de las cinco que tiene la hidroeléctrica ya dejaron de funcionar, otras dos están en riesgo porque si no se levantan los bloqueos el próximo martes y miércoles la empresa tendrá que declarar fuera de funcionamiento otras dos unidades, lo que llevaría al Guavio a operar al 20% de su capacidad instalada.

Le recomendamos leer: Médico colombiano desarrolló producto efectivo que neutraliza gérmenes producidos por covid-19

“Una central de 1260 megavatios que ya saca 500 megavatios de operación, lo que implica que haya menor oferta de energía en el sistema. Al haber menor oferta de energía en el sistema tienen que entrar otras unidades a suplir y potenciar. También puede haber un aumento en los precios de energía” advierte Eugenio Calderón, gerente de generación eléctrica de Enel Colombia.

Y es que la situación de algunas comunidades de la región es bien crítica, Luz Estrella Parra, líder social de la vereda Santa Teresita, cuenta que pese a tener la hidroeléctrica más grande en su región, en su vereda no tienen luz.

Para la próxima semana los manifestantes esperan que el alto gobierno haga presencia y escuche sus demandas para buscar soluciones.