El regalo de Navidad que pidió el papa Francisco, ¿de qué se trata?

El Papa Francisco aprovechó su tradicional mensaje de Navidad “Urbi et Orbi” para hacer un llamado urgente a la paz y la unidad en un mundo sacudido por conflictos armados en regiones como Gaza, Ucrania y América Latina.

Papa pidió un regalo de Navidad

Desde la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, el pontífice argentino exhortó a “silenciar las armas y superar las divisiones” frente a miles de fieles y millones de televidentes que siguieron la transmisión global.

Francisco denunció con fuerza la crisis humanitaria en la Franja de Gaza, agravada tras más de 14 meses de guerra entre Israel y Hamás, y pidió un cese al fuego, así como la liberación de rehenes israelíes.

Asimismo, recordó a los países más afectados por la violencia y la inestabilidad, incluyendo Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua, abogando por soluciones basadas en la verdad y la justicia para promover la armonía social.

El Papa también dirigió palabras a Ucrania, que por segundo año celebra la Navidad el 25 de diciembre, en lugar del 7 de enero como dicta el calendario juliano de la Iglesia ortodoxa rusa.

Francisco instó a “tener la audacia de abrir la puerta a las negociaciones” para alcanzar una paz duradera, pocas horas después de un masivo ataque con misiles rusos contra la infraestructura ucraniana.

Celebraciones de Navidad en el mundo

En Belén, considerada la cuna del cristianismo, las celebraciones navideñas fueron más sobrias debido al conflicto en Gaza. La ciudad, normalmente adornada con elaborados decorados y un enorme árbol de Navidad, limitó sus luces festivas en señal de respeto y solidaridad.

El patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, visitó Gaza recientemente y compartió un mensaje de esperanza:

“Vi destrucción y pobreza, pero también vi vida. No se rinden. Así que ustedes tampoco deben rendirse”.

En Gaza, una pequeña comunidad cristiana se reunió en oración en medio de una atmósfera cargada de dolor.

“Esta Navidad huele a muerte y destrucción”, expresó George Al Sayegh, un desplazado palestino.

Por su parte, en América Latina, la Navidad también estuvo marcada por gestos de solidaridad. Un ejemplo de ello fue Buenos Aires, que una cena solidaria reunió a más de 3.000 personas sin hogar frente al Congreso Nacional, en un contexto de alta pobreza que afecta a más de la mitad de la población bajo el gobierno del ultraliberal Javier Milei.

Mientras tanto, en Francia, la Catedral de Notre Dame de París celebró su primera misa de Navidad desde el incendio de 2019, un símbolo de resiliencia para el país.

En medio de la incertidumbre y los desafíos globales, el Papa Francisco destacó la importancia de mantener la esperanza y la fe. “Invito a todos a ser peregrinos de esperanza”, concluyó, recordando que la Navidad es un tiempo para reflexionar sobre la paz, la justicia y la unidad que el mundo tanto necesita.