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Lo que inició como una celebración terminó en un enfrentamiento en el que más de cincuenta personas resultaron involucradas. ¿Qué pasó?
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El pasado martes 1 de julio, una celebración de pedida de mano en el Centro Recreativo de Artes, en Ribeira (Galicia, España), habría terminado en una violenta pelea entre clanes gitanos provenientes, presuntamente, de Ribeira y Santiago. El enfrentamiento habría dejado como saldo una persona muerta y cerca de una decena de heridos.
Según versiones preliminares, la reunión se habría llevado a cabo en un restaurante reservado para el evento. Sin embargo, poco después se habría desatado una pelea que involucró a decenas de personas y en la que se habrían utilizado armas blancas, bates, palos e incluso vehículos.
De acuerdo con medios locales, la confrontación habría comenzado dentro del establecimiento y se habría extendido rápidamente hacia la vía pública. Testigos aseguran que, en medio del caos, uno de los clanes habría tomado una furgoneta de color blanco y, presuntamente, arrollado a un hombre identificado como Juan Manuel Bentos Montoya, de 36 años, quien habría muerto tras el impacto.
Durante el altercado, múltiples personas habrían resultado heridas debido a los golpes y objetos utilizados como armas. Se estima que al menos doce personas habrían sufrido lesiones, dos de ellas de gravedad.
La Policía Local habría llegado minutos más tarde para intentar contener la situación. Algunos testigos afirman haber escuchado disparos durante la intervención. Aunque hay versiones diferentes, algunos los atribuyen a los propios participantes, y otros a la policía. Hasta el momento no hay confirmación oficial sobre quién realizó los disparos, los cuales, según relatan, fueron al aire.
Varios involucrados habrían huido del lugar en sus vehículos. Posteriormente, algunos fueron interceptados en la autopista AP-9, mientras otras unidades policiales se habrían desplazado hacia una vivienda en la que, supuestamente, podrían haberse refugiado más implicados.
En total, seis personas fueron detenidas, más de diez habrían resultado heridas, y se registró una víctima mortal, en un enfrentamiento en el que se estima participaron al menos cincuenta personas.
En los operativos de contención y atención participaron: la Policía Nacional de Ribeira, la Guardia Civil de Boiro, unidades antidisturbios, ambulancias provenientes de distintos municipios (como Ribeira, Noia, Boiro y Santiago), e incluso un helicóptero medicalizado.
Por ahora las autoridades se encuentran investigando lo sucedido y las posibles causas de la riña entre los clanes, mientras los hospitales prestan su atención en los heridos.