Dos mil chapulines despidieron a Chespirito

Por lo menos mil niños vistiendo como el Chapulín Colorado fueron el séquito de honor del cuerpo de Roberto Gómez Bolaños al salir del estadio Azteca, que hoy estuvo dispuesto no para el juego sino para que todo México despidiera al comediante.

Los mexicanos acudieron sin falta a la cita en el Estadio Azteca para darle el último adiós a Roberto Gómez Bolaños, Chespirito.

El apoteósico homenaje inició en Televisa donde su féretro ingresó a una urna de cristal sobre un remolque rojo que tenía los personajes del Chavo del Ocho y El Chapulin Colorado. La carroza recorrió las calles mexicanas hasta llegar al estadio donde más de 60.000 personas esperaban para darle el último adiós al comediante, que con sus creaciones los divirtió por años.

Su esposa Florinda Mesa, hijos y familiares llegaron hasta el escenario dispuesto en el centro del campo deportivo y allí esperaron la entrada del carruaje con flores blancas.

Al ingresar al estadio todos se pusieron de pie y ovacionaron a Chespirito.

Después de una misa, la canción de Chespirito fue interpretada por un coro de chapulines y chavos.

Su salida del estadio fue con un escuadrón de Chapulines que escoltaron el féretro y de fondo la canción las golondrinas. Despues de tres horas y en medio de honores de los personajes que él creó despidieron a Chespirito.