Lo ‘fuerte’ que se viene para el planeta después de que termine cuarentena

Aunque son varias las teorías alrededor del coronavirus, lo cierto es que haberle puesto una pausa a la rutina diaria del mundo ha ayudado a que el planeta tierra se recupere, de cierta forma, de los efectos del calentamiento global.

Diferentes reportes señalan que, nada más durante la cuarentena obligada que vivió China, se redujeron en cerca de un cuarto las emisiones de dióxido de carbono que suelen emitir. Y, claramente, este es un efecto que también se replicó a lo largo del mundo:

Incluso, de acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas, se puede estimar que existe “una tendencia gradual de reducción de alrededor del 10% por semana durante las últimas cuatro a cinco semanas ha sido confirmada por observaciones de superficie del Servicio de Monitoreo Atmosférico Copérnico de la Unión Europea”.

Ejemplos de los efectos del coronavirus en el calentamiento global no solo han sido las imágenes que se han hecho virales como los animales que retornan a ciertos ambientes antes invadidos, o las de los canales de Venecia limpios, sino también imágenes de nevados desde puntos que no habían sido visibles en 50 años:

Y después, ¿qué?

Si bien los efectos del coronavirus en el calentamiento global parecieran positivos, una de las principales preocupaciones de los ambientalistas es cómo el mundo empezará a retomar su ritmo luego de superar esta crisis.

Esto, especialmente, por temas de reactivación económica, se espera que se incrementen -aún más- los niveles de contaminación cuando la industria necesitará un mayor impulso para volver a producir en forma.

Todo esto dependerá de diferentes factores porque, después de esto, es posible que haya un cambio en el comportamiento.

De acuerdo con un analista del Grupo Eurasia, “una caída sostenida en los precios del petróleo podría provocar que las inversiones a más largo plazo en energía limpia resulten más atractivas para los principales actores del sector energético”.

“El mundo necesita demostrar la misma unidad y compromiso con la acción climática y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que contener la pandemia de coronavirus. El fracaso en la mitigación del cambio climático podría conducir a mayores pérdidas tanto de vidas como económicas durante las próximas décadas”, señala un comunicado de la Organización Mundial Metereológica.

Incluso, un artículo del MIT destaca cuáles son los aspectos negativos de esta situación generada por el coronavirus, para la lucha contra el cambio climático:

• Al cerrarse los mercados de valores, no habrá un mecanismo para financiar proyectos ecológicos o de energía renovable.
• Al caer el precio del petróleo, disminuye el de la gasolina, por lo que se elimina un incentivo para la venta de carros eléctricos.
• Siendo que China es uno de los principales productos de paneles solares, turbinas eólicas y baterías de iones de litio y no están encontrando suministros, se frenarán proyectos de energías renovables en el extranjero.
• En medio de un periodo de recesión económica y una crisis de salud pública, los recursos no serán destinados para el control ni detención del cambio climático.

Así, aunque inicialmente los efectos del coronavirus en el calentamiento global parecieran ser positivos, lo cierto es que se deberán cambiar hábitos y formas de producción que, al verse obligadas las empresas a crear nuevas maneras, más saludables, favorecerían al medio ambiente.