¿Celebrando el empate? Jugadores de Atlético Nacional habrían sido pillados de fiesta
#Video | Parte de la plantilla de Atlético Nacional habría sido vista en tremenda rumba después de partido en Valledupar, ¿quiénes estaban?
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El pasado lunes 16 de septiembre, Alianza y Atlético Nacional se enfrentaron por Copa Colombia en el estadio Armando Maestre Pavajeau, partido que terminó empatado 1-1. Alfredo Morelos abrió el marcador para el equipo de Medellín e Isaac Camargo se encargó de igualarlo desde el punto penal.
Más allá de lo deportivo, en redes sociales circula un video que podría generar inconvenientes en el equipo paisa, ya que, al parecer, tal y como lo cuenta un usuario de X, algunos de los jugadores habrían ido de fiesta luego del encuentro en Valledupar.
“Buena parrandita después de empatar en Valledupar”, escribió el internauta adjuntando un video en el que se pueden ver algunas de las figuras ‘verdolagas’ en lo que parece un bar acompañados de mujeres.
Harlen Castillo ‘Chipi Chipi’, Kilian Toscano, Dairon Asprilla y Johan Castro son los rostros que se pueden identificar en el video. Sin embargo, no es seguro que sean los únicos que participaron del evento; internautas mencionan nombres como el de Jorman Campuzano, Juan Pablo ‘Tatay’ Torres, entre otros.
Que un futbolista vaya de fiesta y consuma alcohol puede verse mal por varias razones, principalmente relacionadas con su responsabilidad profesional y su impacto en la imagen pública.
El alcohol puede afectar negativamente el rendimiento físico y mental de los futbolistas; puede reducir la capacidad de reacción, la concentración y el estado físico general, lo que impacta su rendimiento en los entrenamientos y partidos.
Por otra parte, suelen tener un régimen estricto de entrenamiento, descanso y recuperación. El consumo de alcohol puede interferir con estos procesos, afectando la regeneración muscular y el sueño, lo que podría derivar en lesiones o bajo rendimiento.
Sumado a esto, los clubes profesionales y entrenadores esperan que los deportistas mantengan un nivel alto de profesionalismo y disciplina, dentro y fuera de la cancha. Y es que, si un jugador pone en riesgo su salud o su rendimiento por decisiones personales, puede generar tensiones dentro del grupo o con el cuerpo técnico.